Ser
madre es una de las labores que más admiro y respeto. Esas mujeres que parecen
incansables y que no están muy lejos de tener las fuerzas y entereza de los superhéroes de película.
Día
a día, en mi trabajo me encuentro con mujeres que literalmente su vida se traduce en la de sus hijos,
y es que cuándo hago preguntas básicas como: ¿Cómo empieza tu día? ¿Qué tipo de
ropa te gusta usar? ¿Cuál crees que es tu cuerpo? ¿Cuál crees que es el color
que más te favorece? Me encuentro con respuestas como: “Antes de ser mamá me
gustaba esto…” “Después del embarazo mi cuerpo es…” “No sé qué color me
favorece, ¡pero a mi hija se le ve hermoso el rosado!” Y es allí cuando tomo
conciencia de que en ocasiones las
madres suelen dejar de pensar en ellas mismas, para anteponer nuestros
intereses como hijos.
Así hoy quiero hacer una reflexión con algo que
siempre le digo a mis clientes, “la belleza se
refleja de adentro hacia fuera”, es imposible hacerlo viceversa. Y en el caso
de ser mamá pienso que es igual, es una labor que empieza de adentro y se
traduce en tus hijos.
Por
eso quiero invitar a las madres que me leen diariamente a que tomen conciencia
de la importancia que ellas tienen en el mundo como mamás pero además ¡como
personas! Cada individuo es una obra maestra creada por Dios, y cada uno tiene
valor por ser simplemente lo que es. La paz interior, la imagen personal y el
cuidado del cuerpo ¡son regalos que te puedes hacer a ti misma como persona!
Te
invito que siempre busques en tu día a día espacios para ti misma para
consentirte, reflexionar, hacer ejercicio, leer un buen libro, etc. Adquirir hábitos que te alimenten a ti como
persona y eso inmediatamente se verá reflejado en tu labor como mamá y es asombroso pero también
¡en el estado de ánimo y rendimiento académico de tus hijos!
Hoy
en el día de las madres, quiero felicitar a todas esas mujeres valientes que
día a día dan lo mejor de sí para dejar una huella en las generaciones
venideras y mi anhelo es que recuerden siempre que una mujer que está feliz y se siente bien consigo misma, lo
reflejará en todas las facetas de su vida, ¡incluyendo la de ser madre!
¡FELIZ
DÍA MAMÁS!
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